¿Qué saber?.
Es un examen en el que se visualiza el interior del colon (intestino grueso) y el recto, mediante un instrumento llamado colonoscopio.
El colonoscopio tiene una pequeña cámara fijada a una sonda flexible que puede alcanzar toda la longitud del colon.
Forma en que se realiza el exámen.
La colonoscopia se lleva a cabo en una sala específica de un hospital o centro médico.
Salvo contraindicaciones específicas, le administrarán un medicamento bajo control de anestesista, dentro de una vena para ayudarlo a relajarse. No sentirá ningún dolor. Sentirá una agradable sensación de relajación y un sueño reparador.
Se acostará sobre el costado izquierdo con las rodillas flexionadas hacia el tórax.
El colonoscopio se introduce suavemente a través del ano una vez iniciada la sedación. Se desplaza con cuidado hasta alcanzar el ciego (donde se inicia el colon) y si procede, íleon terminal (última parte del intestino delgado).
Se insufla aire a través del colonoscopio distender el colon y brindar una mejor vista. Se puede utilizar la succión para retirar líquido o heces.
El médico obtiene una mejor vista a medida que se va sacando el colonoscopio. Por lo tanto, se realiza un examen más cuidadoso mientras se va extrayendo este instrumento.
Se pueden extraer muestras de tejido (biopsia) o pólipos con pinzas pequeñas introducidas a través del colonoscopio. Asimismo, se pueden tomar fotografías y/o videos mediante la cámara en el extremo del colonoscopio. De ser necesario, también se pueden realizar otros procedimientos.
Preparación para el examen.
Es necesario que el colon esté completamente vacío y limpio para el examen. Si el colon no está limpio, se puede pasar por alto una lesión en el intestino grueso que necesite tratamiento.
Su médico le indicará los pasos para la limpieza del colon. Esto constituye la preparación para la exploración. Los pasos pueden incluir:
No comer alimentos sólidos durante 1 o 3 días antes del examen
Tomar laxantes
Usted debe beber muchos líquidos claros durante 1 a 3 días antes del examen. Ejemplos de líquidos claros son:
Café, té claro u otras infusiones
Bebidas para deportistas sin colorante agregado
Refrescos sin gas
Agua
Deberá suspender de forma previa los antiagregantes plaquetarios (clopidogrel, prasugrel, ticagrelor…) y los anticoagulantes (Sintrom®, Aldocumar®, rivaroxabán, apixabán, edoxabán, dabigatrán…)
Tendrá que dejar de tomar líquidos o pastillas de hierro unos 7 días antes del examen, a menos que su proveedor le diga que está bien continuar. El hierro puede hacer que las heces se tornen de color negro oscuro. Esto le dificulta más al médico la visualización del interior del intestino.
Lo que se siente durante el examen
Los medicamentos que se le administran para el examen le causarán sueño, así que no sentirá ninguna molestia y casi con seguridad no tendrá ningún recuerdo del examen.
Después del examen, puede tener cólicos abdominales leves y expulsar muchos gases. También puede sentirse con distensión y mal del estómago, lo cual pronto desaparece.
Es muy importante intentar expulsar los gases desde el momento en que recobre la consciencia tras la exploración, sin pudor alguno, pues son la causa fundamental de las molestias tras la exploración.
Usted debe ser capaz de volver a su casa aproximadamente una hora después del examen. Debe hacer los arreglos necesarios para tener alguien que lo lleve a casa después del examen porque estará aturdido y no podrá conducir. Los proveedores no le permitirán salir hasta que alguien llegue a ayudarlo.
Cuando esté en casa, siga las instrucciones acerca de la recuperación después del procedimiento. Estas pueden incluir:
Beba mucho líquido. Consuma una comida saludable para restaurar su energía.
Debe ser capaz de retornar a sus actividades regulares al día siguiente.
Evite conducir, operar maquinaria, beber alcohol y tomar decisiones importantes , al menos hasta el día siguiente a la exploración salvo que se le indique lo contrario.